Carlos García Alejos deja de ser entrenador de nuestro primer equipo. De este modo, se desvincula, de nuestro club, tras cuatro temporadas como míster del Aficionado A.
Carlos García Alejos llegó a CD Canillas en abril de 2019 para afrontar la recta final de la temporada 18-19, cuando el club militaba en Tercera División. Tras tres temporadas en Preferente, una de ellas marcada por la pandemia de Covid-19 y cuarentena de varios meses, nuestro primer equipo logró el campeonato y ascenso directo a Tercera RFEF la pasada campaña. Durante esta, 2022-2023, el equipo ha logrado mantener la categoría sumando 34 puntos y 9 victorias con Carlos a la cabeza.
Desde el club, agradecemos enormemente la labor de Carlos G. Alejos desde el banquillo y le deseamos la mayor de las suertes en todos sus próximos proyectos profesionales y personales.
A su vez, el que hasta hoy ha sido entrenador de nuestro primer equipo ha querido dejar una carta de despedida a aficionados, presidente, cuerpo técnico y jugadores.
«Normalmente no hago este tipo de cosas, pero, en ocasiones como estas, hay que hacer una prudente excepción. Fundamentalmente porque, después de cuatro años, pandemias, ascensos, goles en el último minuto, remontadas, etc., creo que la familia del CD Canillas merece una explicación. Lamento que estas explicaciones no estén llenas de claves ocultas ni misterios. Todo es mucho más fácil, más incluso de lo que he venido escuchando las últimas semanas.
Fernando, al que lanzo mi gratitud desde aquí, me ofreció continuar, lo estudié y lo sopesé. Los 4 años inolvidables tanto en el plano personal como profesional, durante los cuales no tengo ni un solo reproche a quien dirige esta casa de forma impecable. He podido disponer del trabajo de un cuerpo técnico capaz de llevar en volandas hacia el éxito a cualquiera, compañeros de aventuras que, en los momentos más dubitativos, apretaron las filas. Y es que rodearse de los mejores es la clave. El esfuerzo, la dedicación y la tenacidad de todos los jugadores estas temporadas. Sin ellos, nada habría sido posible y, aunque no lo crean, ocupan un lugar de privilegio en mis recuerdos.
Pero al final consideré, en una decisión meditada, que había concluido un ciclo. Todo lo que empieza, normalmente, acaba y no hay que verlo como tragedia o traición. Tomar estas decisiones no es fácil, ni siquiera cuando se toman desde la otra parte. Por tanto, desde este momento, dejo de ser una de las mejores cosas que me han ocurrido en la vida, ser entrenador del primer equipo del CD Canillas.
Aprovecho para dar las gracias a todos. Lo mejor del fútbol es la gente que vas conociendo por el camino. Constancia y sigan domingo a domingo, hasta el último minuto del último partido, puerta grande o enfermería».
Carlos G. Alejos